Santiago, 6 de agosto de 2024

Con el objeto de promover la discusión sobre tendencias, desafíos, oportunidades y prácticas relativas al desarrollo productivo territorial, en el marco del trabajo que impulsa Corfo en cada una de las regiones del país, la entidad convocó al seminario Desarrollo Productivo Sostenible y Estrategias Territoriales.

Como parte del mismo, se realizó el panel Desarrollo Productivo y Territorio, Estado, Perspectivas y Retos, en el que María Teresa Ruiz-Tagle, directora ejecutiva de CLG Chile, llamó a las empresas a incorporar el riesgo climático como un riesgo financiero. “Cuando uno los identifica (los riesgos climáticos), los gestiona, pueden aprovechar las oportunidades y estar mejor capacitados para enfrentar los problemas y siendo Chile un país altamente vulnerable al cambio climático, los riesgos están ahí y van a seguir aumentando en magnitud y frecuencia. Los mejor preparados serán aquellos que logran internalizar los riesgos”, puntualizó.

Parte de este panel fueron también Claudio Castro, alcalde de Renca; Marisol Cortez, de la Cámara Chilena de la Construcción – Valparaíso; Evelyn Henríquez, ChileSertur AG; y Pedro García, director ejecutivo de la Asociación de Gobernadores (Agorechi); moderados por Aintzane Lorca, jefa de Desarrollo Productivo Sostenible, Ministerio de Economía.

Cada uno mostró las realidades del sector al que representan y cómo se enlaza con la sostenibilidad.

Claudio Castro indicó que han buscado la transformación de Renca, partiendo con una transformación social e incorporando también la transformación ambiental, enfrentando el cambio climático, planificando desde esa dimensión.

Renca emite 600.000 toneladas de carbono equivalente y “yo puedo pasearme por muchas partes diciendo que hemos hecho puntos limpios, techos solares, hemos plantado árboles, pero al final del día la pregunta es, ¿qué estamos haciendo y cuántas toneladas de carbono equivalente estamos disminuyendo para alcanzar la carbono neutralidad?  La mitad de esas toneladas de carbono la genera la planta termoeléctrica que tenemos en la comuna. Ahí hay un desafío mayor que tenemos que abordar con esa empresa y con otras empresas”, aclaró el alcalde.

Dijo también el edil que han visto crecer a grandes empresas en Renca y lo que buscan es que el valor económico que se genera en la comuna sea compartido. Hicieron un estudio de encadenamiento productivo y buscan atraer inversión.

Marisol Cortez destacó que con el objeto de bajar los impactos medioambientales en la construcción, junto con Corfo, establecieron un acuerdo de producción limpia (APL), con una mirada social, ambiental y económica. Este APL ha permitido la reducción de residuos en 48%, evitando que este porcentaje  vaya a botaderos. Además, dos millones de toneladas de residuos se convirtieron en subproductos de nueva industria o se reincorporaron a la propia industria, que dejó de emitir 10 millones de toneladas de residuos. “Y son las empresas medianas, las pequeñas que hacen los cambios cuando firman estos acuerdos de producción limpia”, dijo Cortez.

Ser más resilientes

A nombre de CLG Chile, Ruiz-Tagle manifestó que el Grupo de Empresas Líderes por la Acción Climática busca contribuir a la política pública desde la perspectiva del sector privado. Y considerando el último evento de viento y lluvia, puso énfasis en lo que es la resiliencia, que no sólo puso a prueba una empresa en particular, sino a las personas y a la economía.

Destacó también el Acuerdo de Escazú, importante compromiso en términos de sustentabilidad que hace un énfasis particular en lo que es la información ambiental. “Cuando nos queremos hacer cargo de los problemas necesitamos información. Y tanto el Estado como el sector privado han contribuido ya antes incluso de firmar el acuerdo en esta materia. Tenemos también un catastro de los riesgos climáticos a nivel del territorio, muy útil tanto para empresas como para comunas, municipios. Además, desde la Comisión de Mercados Financieros se obliga a las empresas de cierto tamaño, aunque eso va a ir bajando a empresas de mediana y más pequeña, a dar cuenta de la identificación de sus riesgos, a qué riesgos climáticos está enfrentada”, explicó. Por eso la importancia de los criterios ASG (ambiental, social y gobernanza). Una empresa que se hace cargo de estos tres aspectos va a estar mejor preparada para desarrollarse en cualquier escenario. ”Si  logro identificar los riesgos climáticos, me voy a poder anteponer, voy a poder gestionar recursos, voy a poder mejorar mi resiliencia”, dijo Ruiz-Tagle.

Agregó que los ASG ayudan en términos del desarrollo sustentable y también en términos de reputación y de acceso a financiamiento. “Cuando por ejemplo la municipalidad de Renca quiere acceder a financiamiento extranjero, le van a preguntar cómo lo está haciendo, pero no puede mostrarlo de cualquier manera, tiene que hacerlo de manera que sea entendible para los inversionistas. Lo mismo para las cadenas de suministro. Podemos hacer extensiva esta evaluación ASG a nivel de la cadena de suministro. Y la cadena de suministro está muy ligada al territorio”, explicó la ejecutiva.

Por otra parte, Ruiz-Tagle indicó que todos discuten sobre el tema de la luz, pero nadie plantea que se trata de un problema de resiliencia. “¿Estamos haciendo las inversiones necesarias en resiliencia?, ¿cómo se financian esas inversiones? Por otro lado, no se nos cortó el agua, ¿por qué?  Porque Aguas Andinas invirtió en resiliencia, invirtió en tanques que permiten darle 37 horas de autonomía a la región Metropolitana. Pero eso tiene que pagarse. Pero tenemos que ser más resilientes. Es una inversión que tenemos que hacer y podemos acceder a financiamiento. La taxonomía verde que está trabajando el Ministerio de Hacienda, por ejemplo, en ayudar a clasificar las inversiones para poder atraer financiamiento barato para poder hacer este tipo de inversiones es clave”, explicó.

Con este marco, la colaboración público privada es muy importante para seguir avanzando.

En tanto, Evelyn Henríquez señaló que los desafíos de las empresas de menor tamaño están en la participación y el acceso al mercado. “Tenemos una brecha tremenda de poder generar mejores competencias, habilitaciones y políticas de fomento en relación al acceso al mercado. Y no solamente al nacional, también al internacional. Tenemos que enseñar a generar mayor profesionalización. El acceso al financiamiento para una empresa de menor tamaño tiene un costo mucho mayor que para una empresa grande”, explicó.

Finalmente, Pedro García se refirió a los desafíos que enfrentan los gobiernos regionales, destacando la realidad geográfica del país, por la gran extensión de Chile. Además, mencionó las dificultades de recursos humanos e infraestructura para el despliegue territorial.

“Necesitamos profundizar el proceso de descentralización para que las regiones tengan más recursos autónomos. La descentralización son dos cosas simples: plata y poder, si esas no están y las regiones no las tienen, eso es desconcentración u otra cosa, pero no es descentralización”, dijo García.

Destacó también la necesidad de la asociatividad entre regiones para abordar temas territoriales.