Santiago, 19 de diciembre de 2024
El tema ambiental ya se ha transformado en parte del desarrollo económico y con el objeto de analizar lo que se está realizando y las materias en la que se debe poner énfasis, la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile (FEN), el Instituto de Investigación para el Desarrollo, Crecimiento y Economía (RIDGE) y el Banco Central de Chile organizaron el XX Foro RIDGE, Talleres sobre Economía Ambiental (EE) y Hacia un Crecimiento Sustentable (TSG).
Líderes Empresariales por la Acción Climática, CLG Chile, unidad de FEN, participó en la sesión de Política Pública: “Cambio climático, uso del suelo y biodiversidad: perspectivas económicas”, en la que María Teresa Ruiz-Tagle, directora ejecutiva, se refirió a varios temas. Junto a ella estuvieron también Felipe Vásquez, Universidad del Desarrollo, y Enrique Calfucura, Banco Central del Chile; mientras que de manera virtual lo hicieron Allen Blackman, de Inter-American Development Bank, y Ana María Loboguerrero, de Bill & Melinda Gates Foundation.
El foro, que se desarrolló en dos días, abordó materias como recursos naturales y comportamientos de mercado, eficiencia energética, diseño de zonas de bajas emisiones, el papel de las tecnologías de transición y deforestación, entre otras.
La ejecutiva de CLG Chile destacó en su presentación el objetivo de neutralidad de carbono a más tardar en 2050, con especial mención a la Contribución Determinada Nacional (NDC) de Chile, el Comité de Neutralidad de Carbono y Resiliencia, la taxonomía verde, el impuesto al carbono, el sistema de compensación de emisiones y el papel del sector privado en el Artículo 6 de París.
“En Chile estamos en proceso de revisar nuestra NDC. Cada NDC y Estrategia Climática de Largo Plazo (ECLP) definirán el presupuesto nacional de carbono, por sectores económicos, para los próximos 10 años y la posibilidad de ajustar lo que se entiende por neutralidad. Por eso, deberíamos considerar la NDC como la política industrial del país para los próximos 10 años”, expresó Ruiz-Tagle.
El sector energético, por ejemplo, realiza esfuerzos con la descarbonización de la generación de electricidad, la electrificación del transporte en la industria y la minería, los sistemas solares térmicos, la renovación energética de los hogares o taxis eléctricos, entre otras acciones. Sin embargo, hay opciones disponibles en todos los sectores que pueden reducir al menos a la mitad las emisiones para el 2030.
Según Ruiz-Tagle, “las soluciones están, necesitamos aplicarlas, potenciarlas y escalarlas. Y para eso es tan importante trabajar codo con codo el sector público con el privado. Necesitamos implementar. La NDC no se refiere sólo a la mitigación, sino también a la adaptación.
Un ejemplo de esta colaboración público-privada es el Comité de Carbono Neutralidad y Resiliencia que ha hecho algunas propuestas a la NDC.
En Chile estamos en medio de una sequía muy larga y tenemos que hacer frente a esto. Una de las cosas que propusimos fue trabajar con la reutilización y la desalinización del agua. Cosas que son muy complicadas en términos de regulación. Las tecnologías existen y estamos luchando en la implementación”.
Otro objetivo clave es aumentar el impuesto sobre el carbono de Chile, que actualmente es de US$5/ton de carbono.
Además, el país, con sus minerales críticos como el cobre y el litio, desempeña un papel clave en la transición energética nacional y mundial, haciendo hincapié en la gestión sostenible de los recursos para equilibrar los beneficios a nivel local e internacional.
Por otra parte, la gestión forestal y el control de los incendios forestales son cruciales para la captura y el almacenamiento de carbono y, por tanto, para la reducción neta de emisiones.
Importante es también la taxonomía verde, el sistema de clasificación que identifica las actividades económicas sostenibles desde el punto de vista medioambiental. Ayuda a reducir los riesgos financieros y a evitar el greenwashing en la inversión ESG (Environmental, Social and Governance). Atrae inversiones y finanzas verdes que ayudan a descarbonizar la economía, pero también hay retos y estamos en proceso de construirla.
Respecto al sistema de compensación de emisiones, Ruiz-Tagle destacó que los contribuyentes sujetos al impuesto pueden presentar certificados de reducción de emisiones para compensar la cantidad a pagar (sólo se admiten proyectos nacionales). Las reducciones no pueden proceder de fuentes emisoras sujetas al impuesto.
En cuanto al rol del sector privado en el artículo 6 del Acuerdo de París, su papel es crucial en la movilización de la financiación, la innovación y la tecnología para acelerar la acción climática.
Ruiz-Tagle cerró su presentación destacando la necesidad de crear incentivos financieros y mecanismos de mitigación de riesgos en las inversiones, fomentar las asociaciones público-privadas y el desarrollo de capacidades y desarrollar marcos normativos claros y predecibles.