Santiago, 23 de octubre de 2024

Los Líderes Empresariales por la Acción Climática, CLG Chile, se reunieron con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD, para conocer y reflexionar sobre los resultados que arrojó el Informe sobre Desarrollo Humano en Chile, ¿Por qué nos cuesta cambiar?, que plantea conducir los cambios para un desarrollo humano sostenible.

La preocupación de las empresas CLG es el tema climático, en función del cual se han estructurado también los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS) y desde esa perspectiva pueden ser agentes de cambio.   Así lo explicó Mónica Duwe, presidenta del directorio: “Desde CLG podemos contribuir a que Chile realice los cambios, pero todos los chilenos -sector privado, público e individual-, debemos entender que tenemos que contribuir, tenemos que dejar de pensar sólo en cuáles son mis beneficios y mi situación individual. Ese es el gran cambio que tenemos que lograr para avanzar”.

También estuvo presente en este encuentro Louise De Sousa, embajadora del Reino Unido, y según ella “el valor de este informe es que podemos basar la discusión en evidencia y con eso tenemos más herramientas, más capacidad de encontrar las soluciones a los problemas. Pero no va a ser fácil. En el mundo hoy no hay problemas simples; entonces se necesitan esfuerzos de colaboración. Puede llevar mucho trabajo y tiempo, pero hay mucho también por qué apoyar los esfuerzos de los líderes. No se puede culpar sólo a los políticos ni las élites económicas. Hay personas aquí, todos comprometidos con principios de sustentabilidad, que quieren un crecimiento económico y prosperidad sostenible, con justicia social y el sector privado tiene un rol fundamental para alcanzar eso”.

Por su parte, Georgiana Braga-Orillard, representante de PNUD Chile, señaló que el informe busca “profundizar en los temas, porque muchas veces nos quedamos en la contingencia y no salimos de ahí. El cambio no sale sin dolor y creo que con certezas no hay cambio. He escuchado mucho la palabra certeza en Chile, pero para innovar se deben correr riesgos y lo que más se pide son certezas. Eso es una contradicción, no es posible”.

Para María Teresa Ruiz-Tagle, directora ejecutiva de CLG Chile, el país necesita la descarbonización y para eso se necesita más energía renovable, pero “hay problemas en los territorios, no es sólo de permisos, hay un tema con la ciudadanía y esto se trata de valores compartidos, de trabajar juntos, entender a la comunidad. Se necesitan más proyectos, pero hay una barrera social de acercamiento y la diferencia con Alemania, por ejemplo, es que allá los proyectos de energías renovables se hacen en los territorios con la ciudadanía, son proyectos en conjunto y la ciudadanía participa económicamente del proyecto”.

El Informe

Presentado por Maya Silveti, coordinadora de la Unidad de Investigación del PNUD, el informe muestra que Chile ha cambiado de manera profunda en las últimas décadas. Muchos de estos cambios han generado un mayor bienestar en la población chilena y otros han generado desafíos. Hay dificultades objetivas para cambiar, hay cambios que no se han concretado y otros han sido insuficientes. Hay una evaluación negativa de los cambios recientes. En la última década han variado desde un 21% a un 59%.

En su tesis central, el informe dice que nos cuesta cambiar porque las capacidades de la sociedad chilena para conducir los cambios son actualmente insuficientes. Se atribuye esta insuficiencia a dos factores:  predominio de relaciones disfuncionales entre los actores sociales de la conducción ciudadanía élites y movimientos sociales; y factores que inhiben la conducción social a nivel de las instituciones, los discursos públicos y las subjetividades.

Según el informe existe una crítica recíproca élites – ciudadanía.

Por otra parte, los movimientos sociales han sido capaces de desplegar estrategias para incidir en la opinión pública y presionar al sistema político por nuevas demandas y otras insuficientemente reconocidas. Pero al interactuar con la política formal pueden operar con lógicas que obstaculizan la negociación, la agregación de demandas, la construcción de alianzas y acuerdos, el ejercicio de representación y los vínculos con actores sociales y políticos.

El informe revela también que la mayoría de las personas no se percibe como agente de cambios colectivos. Se observa un mayor pesimismo sobre el futuro colectivo, hay una crisis de confianza en el futuro.

Además, el debate público dificulta el diálogo la construcción de acuerdos y la representación.

Pese a las decepciones, persiste el deseo de cambios profundos pero graduales.

El informe muestra una alta desaprobación a la desigualdad en diferentes dimensiones de la vida común.

Por todo lo anterior, el informe plantea que entre las condiciones para construir se destacan: 1. reparar la relación entre élites y ciudadanía, 2. reconstruir la confianza de las personas en las instituciones, 3. establecer acuerdos pragmáticos y realistas entre élites, 4. fomentar un debate público constructivo, 5. fomentar la cultura política de la ciudadanía.

Empresas CLG

Luego de la presentación, BancoEstado y Sodimac entregaron sus comentarios.

Daniel Hojman, presidente de BancoEstado, señaló que “falta una mirada desde la empresa. Hay una especie de mantra con lo que fue la responsabilidad social empresarial. Cuando se desarrolla un proyecto que involucra a una región se piensa que es un proyecto de mi empresa y de la región y de la comunidad. Hay que darle participación a la comunidad”.

En tanto, Juan Carlos Corvalán, gerente de Asuntos Legales y Sostenibilidad de Sodimac, afirmó que como CLG “deberíamos tratar de difundir más el informe en el mundo empresarial. Los roles y la responsabilidad no son equiparables. Las élites tienen más responsabilidad en la construcción del país y nosotros somos parte de las élites”.

Agregó que “tenemos un rol de tratar de abrir la perspectiva. No hay peor cosa en una empresa que tener un mal diagnóstico del mercado. Tenemos una realidad de personas que están enrabiadas, con mucha desconfianza, con una sensación de castigo frente a las élites. Siendo objetivos, muchas empresas entran a los territorios, hacen buenas acciones, pero después se van.  Por eso, tenemos que abrir a nuestras empresas hacia el diálogo. Podemos establecer puentes para abordar los problemas de manera distinta”.

Descargar informe aquí:

https://www.undp.org/es/chile/publicaciones/informe-sobre-desarrollo-humano-en-chile-2024