Entre el 26 de octubre y el lunes 6 de noviembre, Líderes Empresariales contra el Cambio Climático (CLG) sostuvo una serie de encuentros con representantes de los comandos de los candidatos presidenciales Beatriz Sánchez, Sebastián Piñera, Carolina Goic y Alejandro Guillier. El objetivo de dichas reuniones fue conocer las propuestas en política climática de los candidatos, a través de un diálogo cercano, franco e informado.
Alejandra Millán, representante del comando de Beatriz Sánchez, reconoció que si bien el cambio climático no forma parte del programa de la candidata, manifestó su entera disposición a incorporarlo dentro de su agenda en un eventual gobierno.
En un segundo encuentro, Ricardo Irarrázabal, acompañado de Susana Jiménez, expuso sobre los cinco grandes ejes en materia medio ambiental del programa de Sebastián Piñera: institucionalidad medioambiental; calidad del aire; biodiversidad y áreas verdes; economía circular, gestión de residuos y remediación ambiental; y cambio climático. Asimismo, enfatizó en la necesidad de implementar un marco legal para el cumplimiento del Acuerdo de París y la importancia de una arquitectura institucional con estándares técnicos.
En representación de Carolina Goic, Pablo Badenier, expuso parte del programa de medio ambiente y sustentabilidad de la candidata, el que incluye entre sus principales propuestas la gestión y valoración de áreas protegidas; el control de la contaminación atmosférica; el fomento del reciclaje y el consumo responsable; la generación de mecanismos para dotar al Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental con una mirada territorial y la preparación para enfrentar el cambio climático. En su presentación, Badenier recalcó como trascendental la vinculación del cambio climático con otras políticas públicas.
Finalmente, Ítalo Bonet, integrante del comando de Alejandro Guillier, planteó como desafío “generar un desarrollo económico, social y ambiental compatible con la acción para enfrentar el cambio climático”. Bonet presentó las propuestas en medio ambiente y cambio climático, donde destacan el fortalecimiento de la institucionalidad ambiental; el fortalecimiento de planes de descontaminación ambiental; y la creación de una normativa que defina criterios y estándares para el ordenamiento territorial.