CLG-Chile fue parte de la iniciativa liderada por la CPC y valoró el aporte pensando en la Estrategia de Desarrollo 2050 que el país debe entregar a las Naciones Unidas en el marco de los compromisos del Acuerdo de París.
¿Dónde estamos?, ¿hacia dónde queremos ir? y ¿cómo lo logramos? Fueron las preguntas que los principales sectores económicos del país respondieron de cara al cambio climático durante un análisis que se extendió por seis meses y en el cual participó también CLG-Chile Líderes Empresariales por la Acción Climática. La iniciativa, considerada como un esfuerzo inédito de coordinación del mundo privado, estuvo liderada por la CPC y la consultora EY.
Las conclusiones y propuestas quedaron plasmadas en el documento “Visión y Acción Climática del Mundo Empresarial para Chile”, que fue entregado a la Ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, durante un seminario en la Cámara Chilena de la Construcción.
El trabajo se estructuró en ocho mesas representativas de los sectores agroforestal, comercio, telecomunicaciones, servicios y turismo, construcción, cemento e inmobiliario, energía, minería, transporte, aguas y bancario.
Luego de la elaboración de un diagnóstico sectorial, las mesas identificaron acciones de descarbonización y condiciones habilitantes que deberían implementarse para alcanzar las metas climáticas nacionales. Así, fueron propuestas recurrentes los mecanismos de compensación de emisiones offsets, Innovación y Desarrollo (I+D), hidrógeno verde y educación.
“El cambio climático es una realidad innegable y el desafío más importante que enfrentamos hoy como humanidad. Es por eso que requerimos el aporte y compromiso de todos los actores y especialmente del mundo privado, para impulsar la acción climática que nos permita reducir las emisiones con miras a ser carbono neutrales, como nos lo pide la ciencia”, destacó la secretaria de Estado.
Por su parte, el presidente de la CPC, Alfonso Swett, señaló que “hacer frente a los problemas de adaptación y mitigación al cambio climático es una responsabilidad compartida y, por tanto, cada uno desde su ámbito de acción debe hacer un aporte. Las empresas chilenas son un buen ejemplo de responsabilidad y compromiso a la hora de buscar un equilibrio entre el crecimiento económico y el desarrollo social y ambiental, lo que se refleja en este documento”.
Marina Hermosilla, directora ejecutiva de CLG-Chile, destacó “el trabajo realizado y vemos en él un tremendo aporte para iniciar el proceso de elaboración de la Estrategia de Desarrollo 2050 que el país debe entregar a las Naciones Unidas en el marco de los compromisos del Acuerdo de París”. Agregó que “es una muestra de entendimiento por parte del sector privado del problema que genera el cambio climático para la economía, y de cómo podemos transformarlo en oportunidad para nuestro país”.
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